sábado, 18 de febrero de 2012

Ruta de los Ferreiros


Taramundi es el centro turístico más animado de las tierras del interior occidental de Asturias. El entorno del municipio es un laberinto de montes verdes y cálidos valles agrícolas en la frontera con Galicia. Cuenta con acogedores alojamientos, restaurantes de cocina tradicional, hermosos paisajes, cultura popular y artesanía, entre la que destaca la manipulación del hierro, una de sus señas de identidad desde hace siglos. Los valles de Taramundi son cerrados y boscosos, de laderas empinadas y cauces rápidos, con madera abundante y agua para mover la rústica maquinaria de las ferrerías, fraguas, batanes, molinos harineros y el resto de los ingenios hidráulicos que han estado funcionando en los escondidos ríos de Taramundi desde hace mas de mil años.
Los tiempos cambian y las tradiciones desaparecen o se transforman y, sin embargo, el oficio de herrero sigue vivo grácias al turismo y un nuevo interés por las viejas costumbres. En varios talleres artesanos se dedican a la fabricación de un tipo de cuhillería que lleva el sello inconfundible de Taramundi. La marca que deja el fuego de la fragua en el metal y la belleza de las maderas nobles, una combinación sencilla y ancestral en una navaja de fama fuera de estos valles. La ruta de los Ferreiros, es un paseo por los alrededores de Taramundi, en la que se visitan molinos hidráulicos y talleres de artesanía que son la esencia viva de una añejo estilo de vida.

Distancia : 6 kilómetros
Agua : No hay
Desnivel positivo de ascenso : 160 metros
Principales formaciones : Bosque de ribera
Edad recomendable : A partir de los 5 años
Carritos de bebé : Sí con rampas duras
Biciceltas : Sí
Puntos peligrosos para los niños : Ninguno

Como llegamos

Desde Oviedo pro la carretera del Cantábrico, autovía A-8 y N-634, dirección A Coruña. En Tapia de Casariego tomar la salida de Vegadeo por la N-640 y en el centro de la población continuar por la AS-21 dirección Bres y Taramundi.

De donde salimos

Plaza Manuel Lombardero, en Taramundi.

Por dónde vamos



Taramundi

El mejor lugar para dejar el coche en las empinadas calles de Taramundi es el aparcamiento público de la parte alta del pueblo y, una vez hecho, empezar la excursión en la plaza dedicada al maestro Manuel lombardero, aprovechando para conocer el animado conjunto urbano. La ruta baja por la calle principal hacia la carretera, a ambos lados hay tiendas de artesanía y productos típicos de la tierra: embutidos, miel, conservas, licores y otras delicias de Taramundi se asoman en los escaparates. Una parada casi obligada para coger fuerzas antes de la caminata es la panadería Pantaramundi, en la esquina de la plaza del Poyo y la carretera de Vegadeo. Dependiendo de la hora y el apetito se puede elegir entre varios tipos de pan casero de trigo o centeno, dulces de miel o empanadas, bizcochos y un amplio surtido de bollería. La ruta deja atrás las tiendas y baja por la carretera hasta la plaza del Campo, toma la calle El Solleiro por la derecha de la Caja Rural y en la salida de la población, donde comienza la carretera que se dirige a Os Teixos, aparece el cartel de la Ruta de los Ferreiros, señalizado con marcas del sendero de pequeño recorrido PR-AS-18. Hay que seguir unos metros por la carretera y girar a la derecha por una vereda de hormigón que desciende al fondo del valle. El camino baja entre cercados de las fincas y plantaciones de nogales y manzanos. Este tramo es, en realidad, un atajo y a los pocos minutos se sale a una curva cerrada que lleva al conjunto etnográfico de Mazonovo.



Mazonovo

La ruta baja a los molinos de Mazonovo, atraviesa el puente del río Cabreira y gira a la derecha por la carretera de Preira, Navallo y Nío, cruzando el puente del río Turia. El paso por Mazonovo se puede combinar con la visita del Museo Etnográfico , dedicado a la industria de la molienda. La exposición interactiva abre a las 11:00. En el exterior se pueden observar los canales y cascadas de los ingenios hidráulicos que abastecen a los molinos. La excursión continúa por una vereda emboscada que comienza en la curva de la carretera del Nío, nada mas pasar el puente del río Turia y está señalizada con un cartel a Veiga de Zarza y Mousende. El camino discurre paralelo al río y está indicado con las marcas blancas y amarillas del sendero de pequeño recorrido. El bosque está cerrado y ayuda a desconectar el ambiente rural del valle. En la arboleda abundan alisos, robles, castaños, frenos, abedules y una frondosa muralla de vegetación ribereña. En la penumbra forestal el río murmura su personal melodía acuática.

Puente de Pasatempo



La vereda termina en la carretera de Calvín y Les, al lado del puente de Pasatempo. hay que atravesarlo y girar a la izquierda por el carril que sigue la orilla del río Trubia, en dirección a Veiga de Zarza. El desvío está indicado con un poste de la ruta de Los Ferreiros. El entorno es campestre. El agua del río navega plácida y serena regando prados y alimentando molinos.

Veiga de Zarza



Veiga de Zarza es un aldea de antiguos ferreiros que conserva intersantes muestras de arquitectura popular. El camino entra en la población junto al canal de un viejo molino. La mayor parte de los edificios han sido restaurados y convertidos en alojamientos rurales. La piedra, la madera y el agua componen un bonito escenario de casitas rurales, hórreos, pajares, huertas y bosques en la orilla del río Trubia, el alma fluvial del concejo de Taramundi. La ruta sube a la carretera principal del valle, atraviesa el asfalto y continúa la ascensión al pueblo de A Garda. Las casas están enclavadas en la falda de la montaña, a ambos lados de la calle principal. La excursión recorre la aldea y avanza algo mas por la carretera de acceso, hasta que aparece a la izquierda la vereda que sube a las casas de Vilanova. El recorrido es evidente y sencillo por los caminos rurales que comunican las aldeas del valle, pero conviene no perder de vista los postes del PR-AS-18. sobre todo a partir de Vilanova. En la entrada de la aldea hay que girar a la izquierda por un camino tapizado de hierba que mantiene una subida constante por la vertiente umbría de la ladera. En el primer cruce se sigue de frente en dirección de la vega del río Couzogordo. Al otro lado del valle, colgado en la parte alta de los campos de hierba aparece el pueblo de Cancelos.

Pardiñas



El camino asciende por un frondoso bosque de robles y castaños y llega a un cruce señalizado con las marcas del sendero de pequeño recorrido. La ruta gira a la derecha en dirección a Pardiñas. Las cuestas han terminado pero todavía queda una subida algo mas suave hasta el pueblo por un carril ancho y cómodo. En Pardiñas hay varios talleres de fabricación de navajas artesanas y unas vistas excelentes del valle de río Truvia. Los hórreos de los pueblos de Taramundi son del tipo Mondoñedo, con las variantes propias de la zona. Es un tipo de hórreo elegante, alto y estrecho fabricado en piedra y madera típico de los territorios agrícolas donde se ha cultivado mucho maíz. La cámara se apolla en muretes de mampostería que pueden muy altos en las laderas de fuertes pendientes. El techo es de pizarra a cuatro aguas y lleva piedras sueltas para sujetar las piezas contra el viento, dando lugar en ocasiones a múltiples terminales decorativos en forma de punta. En Pardiñas hay unos hórreos bien conservados pero las mejores muestras de arquitectura popular están en las aldeas del interior, como Os Teixos, As Veigas, Teixo y Santa Marina. la excursión atraviesa Pardiñas, sigue por la carretera de acceso y sale a la que conduce a Taramundi.

Taramundi

Bajar a Taramundi por la carretera.

El último refugio de la siderurgia



Taramundi es el último lugar de Asturias donde se conserva la artesanía de la forja del hierro a la manera tradicional. En los tiempos actuales los habitantes del medio rural no necesitan las fraguas ni las ferrerías para fabricar aperos de labranza o utensilios domésticos; en el campo se trabaja por medios mecánicosy los cubiertos y las herramientas se compran en las ferreterías o los centros comerciales. En Taramundi, sin embargo, un grupo de artesanos conserva la tradición fabricando cuchillos y navajas. El proceso de fabricación artesanal se transmite de padre a hijos, que trabajan en los talleres del concejo.Primero laminan y pulen el metal y después elaboran el mango con madera de boj o piel, añadiendo adornos en color o grabados con hierro candente.



Los molinos del mundo


El museo de los molinos de Mazonovo muestra diversas réplicas de los ingenios hidráulicos relacionados con la industria tradicional de la molienda de cereal en varios paises del mundo, como Chinas o Brasil. en el entorno de las instalaciones hay cascadas y canales que mantienen en funcionamiento la maquinaria de los molinos, así como una pequeñas central eléctrica que suministra energía a todo el conjunto. en el interior hay un molino en marcha y al lado otro, pero desarmado, para que los visitantes observen al detalle el proceso de la molienda.



Las ferrerías, un invento medieval

La industria tradiciona del hierro se desarrollaba en tres espacios comunes y complementarios. En la ferrería se obtenía el hierro a partir del mineral, en los mazos o martinetes se estiraban las piezas aplicando calor y en las fraguas los herreros fabricaban las herramientas. Las primeras ferrerías hidráulicas que aparecen documentadas en el norte de España datan del siglo XIII, aunque adquieren mayor grado de desarrollo tecnológico en los siglos XIV y XV. Los principales motores de este avance son, por un lado, el sistema de forja catalana, basado en una corriente permanente de agua para mover las aspas de la maquinaria y, por el otro, el empleo de mineral de hierro y carbón vegetal fabricado con madera de roble, encina, haya o castaño.

El control del fuego

El descubrimiento del fuego constituyó el avance mas importante del hombre primitivo hasta la aparición de la agricultura. Las tribus del Paleolítico obtenían fuego en los incendios provocados por los rayos que caían en las tormentas, por la combustión fortuita de materias orgánicas del bosque, por erupciones volcánicas o emananciones naturales de gas del subsuelo. Cuando el hombre logró dominar el fuego se aseguró luz, caolor, comida cocinada y, finalmente, la posibilidad de fundir metales y obtener armas , herramientas y utensilios mejor elaborados.
El fuego ha sido el alma inextinguible de las ferrerías y las fraguas de Taramundi, la materia prima imprescindible para fundir y modelar el hierro, fuente de cultura popular, tradición y artesanía.

Carbón vegetal, el combustible de las ferrerías



La profesión de carbonero ha estado muy vinculada al oficio de herrero. Las ferrerías necesitaban grandes cantidades de combustible para mantener constantes las elevadas temperaturas de la fragua y el mazo. en el momento de establecer un complejo siderúrgico rural, formado por ferrería, martinete y fragua, era muy importante asegurar una fuente de aprovisionamiento regular de carbón vegetal. La leña para fabricar carbón se talaba en los bosques cercanos a las ferrerías y fue una de las causas de la deforestación entre los siglos XVII y XVIII. La madera de roble y castaño era la más consumida por su elevada capacidad calorífica.

Qué podemos aprender

Siderurgia rural

Los primeros productores de hierro en el norte de España utilizaban técnicas rudimentarias desarrolladas por los celtas en el occidente auropeo. Las ferrerías primitivas, llamadas ferrerías de viento, se instalaban cerca del vetas de mineral para facilitar el transporte pero, sobre todo, en zonas boscosas para asegurar el suministro de carbón vegetal. La siderurgia de la antigüedad utilizaba mineral extraido de la superficie de la tierra, muy rico en óxidos de hierro, que se fundía en hornos semienterrados de tres metros de altura y uno de ancho , colocando capas alternadas de mineral y carbon vegetal. La combustión se realizaba mediante fuelles de piel de oveja o cabra, movidos a mano por los ferrones, los operarios de la ferrerías, que tenían que ser hombres fuertes para manejar las herramientas del oficio y soportar el duro trabajo. El mineral reducido y separado de la ganga se trabajaba en el yunque para obtener el hierro dulce. El rústico procedimiento era conocido como forja catalana y estuvo vigente hasta el siglo XIII , cuando las ferrerías se trasladaron a los bosques de la montaña al cauce de los rios y experimentaron un importante avance tecnológico la introducir la energía hudráulica. Al principio el agua de los ríos se utilizaba para mover los fuelles que suministran el aire necesario para la combustión del horno, reduciendo el trabajo de los ferrones. En el siglo XV o principios del XVI se aplicó la energía natural del agua para mover los pesados martillos de la forja, llamados martinetes, elevando la calidad técnica de las ferrerías españolas a la altura de las mejores de Europa. El aislamiento natural de los valles del occidente de Asturias retrasó la llegada de los avances tecnológicos a las ferrerías de Taramundi. Mientras en el siglo XVI las ferrerías del País Vasco y Navarra lograban el mismo desarrollo técnico que las europeas, en los valles del Eo y Navia la rueda hidráulica no llegó hasta finales del siglo XVII y principios del XVIII, cuando se construyeron los ingenios hidráulicos mas importantes de la región con tecnología de procedencia vasca. Los sistemas de explotación de los ingenios eran variados. En municipios importantes las ferrerías y los martinetes eran propiedad de un monasterio. En los pequeños núcleos del interior podían pertenecer a un propietario o varios campesinos, que utilizaban las instalaciones mediante riguroso turno, llamado veceras, en función de la cuota de propiedad que pagaba cada uno. La importancia de las ferrerías ha sido decisiva en el desarrollo cultural y económico de las sociedades rurales. Los pueblos se abastecían de herramientas, aperos, clavos y utensilios domésticos. Una parte de la producción estaba destinada a la venta en los mercados de Castilla y Galicia.



Equipo

Cuaderno de campo para dibujar los elementos de las ferrerías

Actiividades complementarias y juegos

1.- Observar los canales y los ingenios mecánicos de Mazonovo
2.- Identificar los distintos tipos de árboles en la ribera del río Trubia.
3.- Coger flores en los linderos de los campos y hacer un herbario de flores secas en casa.
4.- Observar los cambios de vegetación entre las laderas de solana y la umbría.
5.- Visitar el taller artesano de navajas.

Qué mas visitar

Museos etnográficos de Taramundi

Museo etnográfico de Esquíos Tlf. 985.97.96.40. Reune una colección que supera las mil piezas entre herramientas y utensilios domésticos que se han utilizado en la comarca. En un edificio aledaño se puede observar la fabricación de navajas típicas de la zona en un taller artesano. Horario : de 11:00 a 20:00.
Conjunto etnográfico Teixois Tlf. 985.97.96.84. Una muestra activa y real de los ingenios hidráulicos que han utilizado los campesinos de la comarca desde hace siglos. El conjunto se compone de mazo, molino harinero, batán, rueda de afilar, central eléctrica y ferrería. En las instalaciones hay un bar y una tienda de recuerdos. Horario de 11:00 a 20:00.
Museo Interactivo de los Molinos Tlf. 619.63.53.30. Es una exposición acerca de la evolución de la industria rural de la molienda a lo largo de la historia en otdo el mundo, desde el año 7000 a. de C. hasta la actualidad. Los visitantes pueden participar en las labores del molino. Horario : de 11:00 a 20:00.

Datos prácticos

Donde dormir

-Hotel Petronila. Pl. del Campo s/n 33775 Taramundi. Tlf. 985.64.68.74. Antigua casa de comidas reconvertida en un moderno y acogedor hotel de dos estrellas. Habitaciones cómodas y bien equipadas. Restaurante de cocina típica de la región.

-Hotel La Rectoral. La Villa s/n. 33775 Taramundi. Tlf. 985.64.67.60. Casona del siglo XVIII restaurada y convertida en un acogedor hotelito rural con buenas vistas del pueblo. Decoración rústica en pizarra y madera.

-Hotel Taramundi. c/Mayor,8. 33775 Taramundi. Tlf. 985.64.68.61. Tranquilo y acogedor hotel rural. Decoración con muebles antiguos y piedra en las paredes.

-Casa rural A Casoa. Santa Marian s/n. 33775 Taramundi. Tlf. 985.97.98.85. Casa de piedra del siglo XVIII restaurada. Habitaciones independientes con baño y calefacción. El alojamiento dispone de salones, biblioteca, zona ajardinada, pajar, huerta y arbolado.

Dónde Comer

-Casa Paulino . Av. de Galicia s/n 33775 Taramundi. Tlf. 985.6345.20. Es el comedor de un complejo integrado por un hotel rural y apartamentos. Cocina asturiana. Fabada, pote asturiano y carnes de ternera, cordero y cabrito. Postres caseros.

-El Mazo.La Villa s/n. 33775 Taramundi. Tlf. 985.63.40.60. Es el restaurante de La Rectoral. Cocina tradicional. Ensalada de oricios, entrecot al Cabrales y tarta de requesón.

-Casa César. 33775 Bres. Tlf. 985.64.68.57. Cocina tradicional y platos innovadores. Caldo de la casa con fabes, grelos y berzas. Trucha, callos, embutidos, asados de ternera y guisos caseros. Postres caseros.

-As Veigas. Veigas s/n 33775 Taramundi. Tlf. 985.97.99.73. Es un centro de turismo rural en una aldea cercana al conjunto etnográfico de Teixois. El comedor es un museo etnográfico. Fabada, lacón con pimientos, quesos y tortillas.